Es una actividad fantástica, la que permite, desde el punto de vista mental en el momento de estar en la cancha el disfrutar del sonido que produce el viento en los pinos, del amplio y prolijo verde, del paisaje calmo y sereno, del contacto directo con la naturaleza y si tenemos en cuenta que un juego dura aproximadamente entre 4 y cinco horas, desde lo físico lo aeróbico toma importancia, incrementando la circulación sanguínea hacia el cerebro, desarrollando la visualización, la que perfecciona con los distintos golpes la trayectoria de la bola, por mencionar algunos de los beneficios. Nos fuerza a desarrollar una excelente coordinación entre los ojos y las manos, logrando un adecuado balance corporal y alcanzar la máxima estabilidad y precisión en cada tiro. Nos transforma en estrategas ya que debemos analizar el entorno, el terreno, el clima, etc. sin importar si uno es hábil o no en el juego.
El golf hoy en día es muchísimo más participativo que años atrás, es una excelente excusa para que toda la familia se reúna un fin de semana dejando de lado la monotonía laboral o escolar y “familiarizar”, lo cual no tiene precio en estos locos tiempos.Como si fuera poco, otro aspecto positivo de este juego-deporte, en Tucumán tenemos alrededor de la capital, tres canchas de golf cuya distancia no supera los 15 kilómetros y tres canchas un poco más lejanas, o sea muchísimas oportunidades de practicarlo.
Nunca pensaste en el golf, esta es tu momento, anímate al “juego de las sensaciones”, el Golf se vive el Golf se siente.
Acércate y te sorprenderás
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Puky de la Rosa
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